extraño tu almohada blanca y tus pies descalzos,
extraño tus sábanas limpias y la tersura de tu piel,
extraño estar contigo, a tu lado, acariciándonos también...
Extraño que con tus piernas me abraces y
con tus brazos me arropes
extraño la melodía que sale
en cada uno de los roces...
Extraño tu mirada nostálgica y tu desnudez,
extraño tu candor mágico que me eriza la piel
extraño el olor del tiempo que se impregna en tu ser
extraño que estemos dentro de la magia del querer...
Me encantan tus dedos largos acariciando mi espalda
y también tu silueta larga arropando mi morada,
y es entonces que te busco por debajo de tu falda
y encuentro un suspiro eterno que se grabará en mi alma...
Y es entonces que abro mis ojos para enjugar las lágrimas
que brotan a borbotones porque es así que cantan
agradecidos a la memoria que nos permite recordarla
y soñar despierto que estás conmigo recostada en mi cama...
Guillermo Lora Santos. "Tipster"
Julio 2014
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