Y los días siguen pasando como el
parte del tiempo que no se detiene, al que no le importa lo que sucede porque
la vida sigue y no puede parar, aunque haya algunos que quisieran los instantes
detener, los segundos caminan y a la noche sigue el amanecer…
El tiempo no tiene calificativo
ni de bueno ni de malo, sucede y sólo eso, acontece en partes iguales y en las
mismas se va extinguiendo aunque no siempre se recuerda en la misma proporción…
Hace mucho tiempo que no estamos
juntos y a pesar de que la distancia y el tiempo parecieran separarme de tu
lado, mis recuerdos siguen vivos y las vivencias que tuvimos, mantienen la
esperanza activa, mantienen mi energía…, y mi corazón y mente se funden y me
dicen que te extrañan cada día y que basta mirar hacia adentro para recordar tu
aliento, tu mirada y un momento, aquél que siempre está presente porque
significa mucho en mi vida porque para interpretarme hay que conocerlo y porque
unió dos vidas y las mantiene unidas sin saberlo…
Apenas me decían que lo verdadero
está en la conexión de las almas y que lo exterior es mera apariencia y que lo
que perdura para siempre es la sutil relación establecida y alimentada con la
convivencia con alguien que representa algo muy hermoso de la existencia…
Los seres somos terrenos pero nos
volvemos importantes y trascendemos cuando lo mundano lo convertimos en etéreo
y nos importa más el ser humano por lo que lleva dentro y no porque hizo o no
hizo o porque no nos gustó su comportamiento…
Guillermo Lora Santos.
Tipster
noviembre 2012